Siete claves para afrontar las diferencias cognitivas de los alumnos

Conocer la lógica de pensamiento de nuestros alumnos nos permite ajustar el proceso de enseñanza. A pesar de que el desarrollo cognitivo sigue unos patrones universales, estos no están estrictamente relacionados con la edad cronológica de los niños.

Las capacidades de nuestros alumnos son la suma del desarrollo biológicamente predeterminado y del desarrollo socialmente mediado.

Los psicólogos distinguen tres aspectos del desarrollo humano: la edad cronológica, la edad mental y “la edad socioemocional”. Estas tres partes, dentro del mismo individuo, no necesariamente avanzan al mismo ritmo. Un alumno puede comprender ciertos conceptos abstractos incluso antes de cumplir la edad media correspondiente a la siguiente fase del desarrollo cognitivo, mientras que su funcionamiento socioemocional puede estar por debajo de lo esperado para su edad.

Cuatro factores influyen en una temprana y alta capacidad de razonamiento de cada niño:

1. la existencia de una competencia temprana o talento innato en un área del conocimiento,
2. la familiaridad o experiencia con los conceptos de un área del conocimiento,
3. la interacción con los que tienen más conocimiento en un área o con materiales estimulantes, y
4. aprender en un contexto sociocultural familiar.

Actualmente las políticas educativas, de manera global, están insistiendo en que la escuela tiene que potenciar el desarrollo cognitivo, mientras que el desarrollo socioemocional sigue en un segundo plano. Pero, ¿estamos seguros de que sabemos estimular adecuadamente, por lo menos, esta parte cognitiva?

Los docentes tienen que detectar los retos que cada uno de los alumnos puede superar con un poco de ayuda, y enfocar su trabajo en ellos.

La diferencia entre las tareas que un alumno puede hacer sin ayuda y lo que no puede lograr ni con mucha ayuda marca su zona de desarrollo próximo. Dicho de otra manera, los docentes tienen que detectar los retos que cada uno de los alumnos puede superar con un poco de ayuda, y enfocar su trabajo en ellos, hasta que el alumno consigue superarlos sin ninguna ayuda. Cualquier docente sabe que sus alumnos tienen diferentes zonas de desarrollo próximo, pero ser capaz de atender a tanta variabilidad es muy difícil y requiere muchas competencias específicas de adaptación e instrucción que pocos llevan innatas.

Uno de los grandes retos para los docentes es el de proveer suficiente variedad de materiales que satisfagan las necesidades de sus alumnos y mantener la motivación para aprender en cada uno de ellos. La fórmula es sencilla: ofrecer a cada alumno los materiales que no son demasiado fáciles ni demasiado difíciles para su nivel de desarrollo cognitivo.  Sin embargo, la situación se complica cuando hay que aplicarlo en un aula de casi 30 alumnos, donde el material es bastante limitado.

Cómo responder a las necesidades cognitivas de todos los alumnos en un aula

A la hora de programar sus clases, los docentes deben tener en cuenta lo siguiente:

  • La evaluación de los conocimientos previos, saber qué conceptos ya conocen los alumnos es crucial.
  • El desarrollo cognitivo y la zona de desarrollo próximo no deberían estimarse según la edad de los alumnos, sino según sus capacidades.
  • Potenciar el razonamiento en las áreas de conocimiento cercanas a cada alumno y en contextos socioculturales que sean familiares.
  • Los temas nuevos deben presentarse en un nivel de dificultad moderado, de manera no demasiado fácil ni demasiado difícil para los alumnos.
  • El material de aprendizaje utilizado debe ser variado, desde lo más simple a los más complejo y profundo.
  • Los grupos de trabajo deben ser heterogéneos, donde cada alumno tiene diferente nivel de habilidades y competencias.
  • La interacción con alumnos más mayores o expertos en ciertas áreas de conocimiento debe ser una costumbre en el proceso de enseñanza.

Diferencias cognitivas

2 thoughts on “Siete claves para afrontar las diferencias cognitivas de los alumnos

Deja una respuesta